SUCULENT
Mi
buen amigo Jorge Torres y su esposa Inma nos llevaN a cenar a este nuevo rincón del Raval, que
por cierto no deja de inaugurar locales interesantes, Suculent.
La entrada, la decoración,
los detalles, el hecho de que la cabecera de nuestra mesa estuviera presidida
por una foto de “Manolete”, en fin todos los presagios auguraban una noche
extraordinaria y la confirmación de que el bueno de Jorge, otra vez, no se
había equivocado.
Por cierto, y antes de entrar
en materia, tienen una sala camuflada dentro de la propia cocina, preparada
para un mínimo de 6 personas, que hay que visitar ya, aunque mucho me temo que
la lista de espera es considerable.
Una de las mayores alegrías
solo sentarnos es encontrar un lugar en Barcelona (Vaso de oro aparte) donde
te sepan servir una buena caña. Tuve una experiencia el otro día en el recién
inaugurado Mercat Princesa, que es de chiste. Prometo contarla el día que hable
de este nuevo local del Born, al que prefiero
dar una nueva oportunidad antes de decir todo lo que pienso de él.
Paseos por Madrid y Sevilla le hace falta a
más de uno que se dedica a esto de poner cañas. Y aquí está el error, la caña
no se pone, se tira y el que no tira porque se gasta, que se la tome él.
Pero vamos al lío, la carta es extensa, bien explicada, sabes lo que vas a pedir y cada uno de los ingredientes
que forman el plato, y como en realidad son platillos, pues todo para compartir
y así alcanzas una mayor opinión.
Caballa en escabeche, un
pescado sabroso de carne prieta y que estaba bien tratado, muy al punto. Fresco
y rico.
Ceviche de gambita roja. Para
mi uno de los mejores platos de la noche, un plato refrescante, con una
magnifica presentación, explosión de cítricos que dirían los eruditos, y donde
a pesar de ellos el aguacate sabe a lo que es, y lo más importante, la gamba
también.
Crema de foie con maíz y
cacao. Bonita presentación y una perfecta conjunción de sabores; a mi personalmente me pareció un pelín “dulce”, pero gustó.
Ensalada de tomate, fresa y
pecorino. Nada que objetar, magnífica ensalada con productos muy frescos y muy
elegidos; los tomates y las fresas en su punto, otro acierto.
Ortiguillas Gaditanas. ¡Y olé! Pocas cosas tienen el sabor a mar que tiene la ortiguilla, son sensacionales y
estaban magistralmente rebozadas, sin una sola gota de aceite sobrante y sin perder
un solo ápice de sabor. Un diez.
Croquetas de rabo de vaca
vieja con trompetas de la muerte. Gracias en primer lugar por llamar a las
cosas por su nombre, gracias por no engañar a la gente hablando de croquetas de
rabo de…… y sobre todo gracias por hacer de la croqueta algo más.
Ventresca de atún a la brasa
con salsa de piñones. Lo que dice el enunciado del plato es lo que es.
Extraordinaria ventresca, fenomenal el punto de cocción. Una muy lograda
mayonesa de piñones y unos tomatitos confitados.
Chuleta de parpatana de atún
rojo a la brasa con patatas fritas. La parpatana es una de las partes internas
del atún, concretamente la pieza que rodea la boca por bajo, mandíbula y
cuello. La carne es muy jugosa y sabrosa. Estaba muy rica.
Como esto no podía terminar
así, nos lanzamos a por el último plato, unas albóndigas de sepia y butifarra
negra. Un acierto más de este
restaurante al que por lo pequeño y repleto que está, no le hace falta más
publicidad, y encuentro que haciendo las cosas así, es normal que este hasta
los topes.
Tres pequeños postres para
degustar: un pastel de queso Brie con gelatina de moscatel, unos fresones con
helado de mató y miel, y pastel de chocolate con cítrico.
El primero de los tres, para mí,
marcó la diferencia, un señor postre, un extraordinario pastel de queso, de
verdad.
Una buena carta de vinos ya
clasificadas por precios; es decir, tienes el presupuesto y te vas directamente
a la columna de lo que quieres gastarte. Muy clarificador.
En nuestro caso un
“Mestizaje”.
No hay mucho más que decir,
dar las gracias otra vez a mis guías, y felicitar a los responsables de este
local por su acierto, acierto que como casi todo en la vida se logra con
dedicación, y aquí sí que la hay.
SUCULENT Rambla del Raval 43 08001 Barcelona Telf. 934436579
Comentarios
No sé si han millorat el tema, però el prendre vi amb copes de Inedit, em va desagradar.
Però el menjar era bo...